domingo, 20 de septiembre de 2009

Una pequeña reflexión. Una gran demanda.

Después de descansar de la semana y del Congreso de Saac, vuelvo con las pilas cargadas a comentaros algo que me venía rondando hace tiempo. Así que va a ser algo que voy a plasmar aquí y de la que intentaré olvidarme, porque soy de esas que pueden darle mil y dos mil vueltas al mismo tema.

¿Y por qué he decidido escribir sobre ello ahora? Porque me he dado cuenta de que no estoy sola, de que no soy la única que ha visto las cosas como yo. Que es algo que se repite en un montón de coles. De esta forma, si a alguien le pasa alguna vez (como yo, que aún me considero novatilla) que sepa que no está sola!

En cinco años que llevo trabajando de maestra interina, de un lado para otro, he pasado por unos doce coles. He visto de todo, he aprendido un montón. Pero me he encontrado con un prototipo de tutor. Y me he sentido sola. Normalmente, por los pueblos, las maestras de Audición y Lenguaje estamos solas en materia de atención a la diversidad. Y, lamentablemente, aún se sigue manteniendo la creencia de que los "niños especiales" son nuestros. Y, lamentablemente, nosotras asumimos ese rol. No sé si por el bien de los chicos, o por no complicarnos la vida.
Eso por un lado.
Por otro lado, parece que todo el mundo se ve en el derecho de valorar tu trabajo, aunque no lo vea. Como dice una compi, hay que decirles que "no tenemos una varita mágica". Es decir, la responsabilidad de la "curación" también recae sólo en nosotras.
Pero, lo más grave, lo que más me preocupa, es la actitud de ciertas personas (por supuesto, no todas) hacia la atención a la diversidad. Cuando yo era niña e iba al colegio veía cómo se enseñaba a la "generalidad", a "los buenos", a los que no tienen problemas. ¡Pero hoy en día, seguimos igual!
¿Qué hay de la empatía, la individualización de la enseñanza, la compensación de las desigualdades...? Aún suenan expresiones como "si les das facilidades, es agravio comparativo", "ese niño no tiene DERECHO a los apoyos", "¡Qué optimista eres!"...
Lo triste de todo esto es que, cuando por las mañanas te acercas al centro de trabajo, vas pensando "cómo batallar" con Fulanita, cómo conseguir implicarla en un programa de modificación de conducta, cómo conseguir que refuerce los logros del niño (y que los vea!), que se ponga en su piel, que le dé una oportunidad, que no lo juzgue... ¡Y os estoy hablando de Primaria, no de la universidad, ni de secundaria!
Os podéis imaginar que el principal problema está con los niños que tienen dificultades de adaptación, de conducta. Con los años voy odiando el calificativo VAGO, porque va adquiriendo no sólo un matiz muy peyorativo, que ya lo tiene de por sí, si no que va acompañado con el gesto de colgar la toalla: Ese niño está "perdido", no hay nada que hacer con él por que no lo merece. ¡HORROR!

Así que, como no soy de las que se quejan y ya, PROPONGO algo que no nos pillará de nuevas a ninguno de los que trabajamos en este ámbito:

¡¡¡FORMACIÓN AL PROFESORADO EN MATERIA DE ATENCIÓN A LA DIVERSIDAD!!!

Estuve hace tiempo en un seminario de aprendizaje cooperativo, y todos éramos o especialistas en Audición y Lenguaje o especialistas en Pedagogía Terapéutica, pero hay un pequeño problema y es que estas estrategias funcionan, pero las tienen que poner en marcha los tutores. Y yo no vi ninguno.

Así que, no sé si alguien se habrá sentido identificado, alguien piense que estoy loca y en qué mundo vivo, pero era algo que bullía en mi cabeza y que no sabía qué hacer con ello y... ¿para qué sirve un Blog?

Gracias por leerme.

4 comentarios:

Rose dijo...

No soy educadora, tan sólo madre de dos niños que forman parte de lo que consideramos el "grupo de los buenos", pero entiendo el calvario por el que debéis de pasar quienes no sólo tenéis que batallar con los "problemas" de los niños, sino con la falta de entendimiento y de recursos del sistema en general.
Creo que te gustaría leer "El lugar de la infancia" de Jaume Funes. Justamente ahora estoy con él, y aunque ya digo que mis niños no son supuestamente "problemáticos", me tiene enganchada con sus reflexiones.
Un saludo.

Laura dijo...

Muchas gracias! ahora mismo lo encargo a mi librería favorita! Un saludo!

Is@Hz dijo...

Me alegro mucho de haber dado contingo y con tus reflexiones respecto a los tantos casos que se dan por perdidos en las escuelas y los institutos. En general, te miran como bicho raro sólo por intentarlo. Me has transmitido tu brisa de ánimo y esperanza. Gracias también por seguirme.

Laura dijo...

Sí. A veces me han llamado "la de las causas perdidas". ¡Qué triste! Pero bueno, parece ser que por solos que nos sintamos, ¡hay más gente como nosotros!
Un abrazo!